Kevin Johnson, el CEO de la multinacional, viajará a abordar la cuestión con la policía, el alcalde y otros referentes de la comunidad. También se disculpará en persona con los dos hombres que fueron injustamente arrestados la semana pasada en uno de los locales de Filadelfia.
Starbucks continúa enfrentando los coletazos que trajo el arresto de dos afroamericanos en uno de los locales que la cadena tiene en la ciudad de Filadelfia el jueves 12 de abril. Kevin Johnson, el CEO de la multinacional, ya había emitido varias disculpas públicas, se refirió a la detención como reprochable y prometió realizar acciones para que no vuelva a ocurrir algo similar.
Esta semana, el ejecutivo invitó a los dos hombres que sufrieron la innecesaria estigmatización a reunirse con él. Johnson planea ir hasta Filadelfia para abordar la controversia con la policía, el alcalde y otros referentes de la comunidad. Las dos víctimas de la detención aceptaron el encuentro.
“Quisiera dialogar con ellos para poder asegurarles que tenemos la oportunidad de realmente entender la situación y mostrar algo de compasión y empatía sobre la experiencia que pasaron. Finalmente, mientras trabajamos para resolver esto, me gustaría invitarlos a que se junten conmigo para encontrar un camino constructivo para resolver esta problemática”, expresó el CEO.
El día del arresto
El gerente del establecimiento en Filadelfia se acercó a los dos afroamericanos y les pidió que abandonaran el local. Ellos habían pedido usar el baño y en el local se negaron porque no habían comprado nada.
Después de que el gerente les pidiera retirarse, ellos respondieron que estaban esperando a un amigo y se negaron a marcharse. Fue entonces que el encargado llamó a la policía.
El momento del arresto fue capturado en un video que se volvió viral tras su publicación en Twitter. En él se ve cómo los agentes de la Policía de Filadelfia detienen a los dos hombres en la tienda y se los llevan esposados.
“Llamaron a la policía porque estos hombres no habían ordenado nada. Estaban esperando a que llegara un amigo, quien llegó mientras a ellos se los llevaban esposados por nada”, explicaba la leyenda de Melissa DePino, la usuaria responsable de subir el post a Twitter.
Las imágenes han obtenido millones de reproducciones y han desatado críticas por llevar a cabo esta acción supuestamente con criterios raciales. El incidente llevó a numerosas protestas y boicots contra Starbucks en Estados Unidos en estos últimos días.
