Un grupo de marcas líderes alumbra el camino hacia la circularidad en la industria del calzado

El proyecto “Closing the Footwear Loop”, liderado por Fashion for Good, busca reducir el impacto ambiental de un sector en el que el 90% de los productos termina desechado.

La organización Fashion for Good anunció el lanzamiento de “Closing the Footwear Loop”, una importante iniciativa que reúne a 15 marcas líderes de moda y calzado con el objetivo de potenciar sus programas de circularidad. Este proyecto colaborativo apunta a transformar el actual modelo de la industria del calzado: combatir el desperdicio, mejorar los diseños circulares y establecer sistemas para la reparación, reutilización y reciclaje son las principales metas. 

Entre las marcas que se sumaron a este iniciativa se encuentran Adidas, Puma, Dr. Martens, Inditex, Lululemon, On, Otto Group, Reformation, Target, Tommy Hilfiger, Vivobarefoot y Zalando, quienes buscan reducir el impacto ambiental de un sector donde el 90% de los productos termina desechado.

Una industria con gran impacto

El desafío es enorme. La industria mundial del calzado produce la asombrosa cifra de 23.000 millones de pares de zapatos al año, una cifra que resalta tanto su escala como su huella ambiental. Cada zapato se compone en promedio de más de 60 componentes diferentes, que van desde telas y plásticos hasta caucho y adhesivos, ensamblados intrincadamente para satisfacer las demandas de rendimiento, estética y costos. Sin embargo, esta complejidad dificulta la adopción de prácticas circulares, dejando al sector rezagado en innovación circular en comparación con otras áreas de la moda.

Según investigaciones de McKinsey, más de dos tercios de la huella de gases de efecto invernadero de la industria proviene de la obtención y elaboración de calzado. El mercado global de calzado, que tiene un valor de US$ 439.000 millones, se proyecta que crecerá un 4.3% anualmente hasta 2030. No obstante, alcanzar un crecimiento sostenible sigue siendo un reto para las más de 500 empresas de vestimenta, calzado y textiles que se han comprometido a reducir sus emisiones de carbono basándose en objetivos científicos.

Katrin Ley, directora general de Fashion for Good en Ámsterdam, afirmó que el éxito dependerá de la capacidad de la industria para implementar la circularidad a través de procesos medibles y basados en datos en las etapas de diseño, producción y ciclo de vida final.

Además de innovaciones aisladas, se han presentado esfuerzos para crear zapatillas reciclables y zapatos compostables. A través de proyectos piloto, reducir la cantidad de componentes en las zapatillas comunes es un desafío. Por ejemplo, Asics lanzó el año pasado su Nimbus Mirai, que se promocionó como el primer par de zapatillas para correr reciclables. Puma, por su parte, probó un modelo clásico en 2023 para comprobar si era compostable.

Otras iniciativas de circularidad en el calzado por parte de las marcas se concentran en la reparación, reutilización y reventa. Dr. Martens presentó hace diez meses un portal para la venta de botas de combate de segunda mano, mientras que sitios como Allbirds ReRun y New Balance Reconsidered se encaminan hacia la reventa de zapatillas.

En busca de escala

Esta flamante iniciativa colaborativa contempla la elaboración de un mapeo detallado de los flujos de residuos de calzado en Europa y el desarrollo de un plan integral para el diseño circular de zapatos. También se explorarán maneras de reutilizar, reciclar o reutilizar de manera sostenible los zapatos al final de su vida útil.

Los participantes de “Closing the Footwear Loop” colaboran con la iniciativa “The Footwear Collective”, que se lanzó en noviembre de 2023 a través de la organización EarthDNA. Entre los miembros fundadores de este grupo se encuentran Brooks Running, Crocs, Ecco, New Balance, On, Reformation, Target y Vibram.

“La escala es esencial para el éxito y la complejidad de la fabricación de calzado agrava la dificultad de la circularidad del calzado”, dijo Yuly Fuentes-Medel, fundadora y directora ejecutiva de The Footwear Collective. Con sede en Cambridge, Massachusetts, también es socia de riesgo de Closed Loop Partners y directora del programa MIT Climate Project.

Entre las actividades planificadas para 2025, “Closing the Footwear Loop” trabajará en proyectos piloto para clasificar y separar materiales de calzado, analizando los datos obtenidos. También se elaborarán criterios de circularidad y se evaluará su integración en software de moda circular.

El esfuerzo se consolidó cuando un grupo de marcas de Fashion for Good identificó los desafíos de escalar la circularidad. Ley explicó que, a diferencia de la indumentaria, el calzado está compuesto por mezclas de materiales complejas, construcciones intrincadas y una infraestructura de reciclaje limitada, lo que dificulta la implementación de soluciones al final de su vida útil. La iniciativa fue lanzada para enfrentar estos retos.

“Al reunir nuestra experiencia para abordar desafíos y oportunidades compartidos, podemos avanzar más rápido para construir un futuro más circular”, dijo Crispin Wong, director senior de productos y envases sostenibles de Lululemon, en un comunicado de prensa.

 

Artículo Anterior
Empresas americanas se alejan de objetivos de diversidad e inclusión

La lista de empresas americanas que se alejan de sus metas de diversidad e inclusión sigue creciendo

Artículo Posterior
Sancor Seguros

Grupo Sancor Seguros incluyó el proceso de doble materialidad en su nuevo reporte

Total
0
Share