En esta entrevista, Betina Azugna, Gerente de Sustentabilidad del Grupo Sancor Seguros, repasa las principales áreas de trabajo de la compañía en clave ambiental. Huella de carbono, economía circular a partir de residuos de siniestros y
El trabajo de Sancor Seguros en clave ambiental lleva larga data. La compañía cuenta con una Estrategia de Cuidado del Ambiente hace más de 10 años, centrada en reducir el impacto directo del negocio a mediano y largo plazo. Desde la certificación LEED del edificio corporativo, pasando por una prueba piloto de medición de huella de carbono o prácticas de economía circular con los residuos de los siniestros, el alcance del trabajo de la compañía es de lo más amplio. En esta entrevista Betina Azugna, Gerente de Sustentabilidad del Grupo, repasa las principales áreas de trabajo y los próximos pasos en materia ambiental.
Fenómenos impredecibles
La evaluación de posibles escenarios asociados al cambio climático es sin duda una tarea clave en la industria y Sancor Seguros no es una excepción a la regla. Las cada vez más frecuentes e impredecibles catástrofes naturales en todo el mundo, incluso en zonas que históricamente no eran consideradas de alto riesgo catastrófico, están golpeando de lleno en la industria. “Esto no solo está teniendo un alto impacto en los seguros que cubren principalmente riesgos de la naturaleza, como los agropecuarios. Además, tiene efectos sobre los riesgos secundarios en el resto de los ramos, a través de sus coberturas adicionales a la principal que amparan dichos riesgos, como el impacto que puedan tener en relación a la pérdida de beneficios por el cese de actividades o incluso en la mayor propagación de ciertas enfermedades”, precisa Azugna.
Y esto tiene una incidencia bien concreta en la cartera de la compañía. Comparando con el ejercicio anterior, se registró un incremento del 200% de los siniestros por fenómenos naturales tanto en el ramo Incendio como en Todo Riesgo Operativo, especialmente en diciembre 2023 por el temporal que afectó el AMBA, Bahía Blanca y otras localidades.
Además, en el ramo de seguros agropecuarios, la siniestralidad fue cercana al 100%, debido a los eventos climáticos extremos, caracterizados por tormentas aisladas, pero de alto impacto, que afectaron principalmente los cultivos de trigo y cebada. Además, en seguros forestales, la siniestralidad a causa de incendios fue del 98 por ciento.
Hacia una economía baja en carbono
“El riesgo que implica el cambio climático se considera actualmente uno de los más urgentes a los que se enfrentan el mercado asegurador y reasegurador, dado el mayor número de siniestros a medida que aumentan las catástrofes naturales y sus consecuentes pérdidas”, resume la ejecutiva. Y asegura que por eso hoy priorizan como tema material los “Riesgos y oportunidades del cambio climático”.
“Desde Grupo Sancor Seguros entendemos que, como empresa, la única forma de lograr un desarrollo y un mercado sostenibles es acelerar la transición a una economía baja en carbono; y en ese camino, como aseguradora podemos comenzar gestionando los riesgos ambientales no solo desde la remediación, sino también desde la identificación y la prevención”, explica Azugna.
La compañía trabaja en un Plan de Gestión Ambiental Integral con acciones concretas (correctivas y preventivas). Como primer paso, ya están desarrollando un Mapeo de Riesgos Ambientales, asociados a la actividad operativa del Grupo en Argentina. Se definieron dos matrices: riesgos directos (impactos que devienen exclusivamente de la actividad de la organización) y riesgos indirectos (impactos surgidos a través de las coberturas en diversas industrias). “En el próximo ejercicio, estaremos analizando la Matriz de riesgos directos, para elaborar un plan adecuado y con plazos de acciones a implementar”, anticipó.
La segunda vida de los residuos siniestrados
Al igual que los riegos asociados al cambio climático, la economía circular también tiene un gran peso en la estrategia ambiental del Grupo Sancor Seguros. “Cada año vamos progresando en dar destino sustentable y reingresar de algún modo al circuito productivo todos aquellos materiales que ya no sean útiles para la empresa”, cuenta Azugna.
Estos residuos provienen de dos fuentes principales: los residuos de las operaciones diarias en las oficinas y aquellos bienes siniestrados que ya no pueden repararse para los asegurados y a los cuales hay que darles una disposición final. Estos últimos incluyen los autos con siniestro total y residuos electrónicos (RAEE).
En el ejercicio 2023/2024, por ejemplo, se trataron 598 vehículos en el Centro de Reciclado de Vehículos de CESVI (29,7% del total de las aseguradoras). Y como resultado se comercializaron 2.013 autopartes y se entregaron 2.049.137kg de materiales a entidades para reciclado o disposición final segura. A esto se suman 1.532 kilos de residuos electrónicos provenientes de sinestros, entregados a entidades certificadas para reciclar.
En el caso de la gestión de automóviles que sufren siniestros con destrucción total, el abordaje es a través del Centro de Reciclado de Vehículos Legales de CESVI, que cuenta con un desarmadero que implementa las mejores prácticas de procesamiento de vehículos siniestrados: descontaminación, desarme, clasificación de las autopartes que luego serán comercializadas, reciclado de otras partes del vehículo (neumáticos, baterías, plásticos, vidrios, metales, hidrocarburos) y disposición final segura de los elementos que no puedan recuperarse.
Las piezas usadas que se retiran de los vehículos (motores completos; cajas de velocidad; puertas; tapas de baúl y capot) son vendidas en el circuito legal a precios muy accesibles, contribuyendo tanto a la reducción del robo de vehículos con la intención de ser desarmados para vender en el mercado ilegal, como a la reducción de los desechos enviados a disposición final en vertederos a cielo abierto.
Asimismo, CESVI posee alianzas estratégicas con distintas organizaciones que ponen en valor, reciclan o dan disposición final segura a las partes que no pueden venderse. La chatarra, por ejemplo, es fundida y transformada en materia prima para la fabricación de acero. En el caso de las cubiertas se separa el caucho para su tratamiento y reutilización en césped sintético, construcciones civiles, asfaltos o membranas impermeables
Huella de carbono
Otra de las áreas de trabajo de Sancor Seguros en materia ambiental es la medición de huella de carbono, con el objetivo de neutralizar las emisiones generadas por sus operaciones. Hasta el momento, se realizaron dos procesos de medición de la huella de carbono de la operación en la ciudad de Sunchales, donde está la casa matriz, con el objetivo de comenzar a conocer y evaluar la magnitud del impacto ambiental generado por los gases de efecto invernadero (GEI) emitidos por las actividades.
La primera, en 2022 sobre la operación del año 2021, tuvo un alcance limitado (1, 2 y 3) y estuvo asociada al Edificio Corporativo de la Ciudad de Sunchales. En ese entonces, arrojó el valor de 2.057 tCO2e.
La segunda y última medición fue en 2023 y arrojó una huella de 3.592,80 tCO2e, generadas por la actividad realizada durante 2022 en todos los edificios de Sunchales (Alcance parcial, nivel 1, 2 y 3). “En esta segunda medición pudimos registrar que la adquisición de vehículos híbridos para renovar nuestra flota de autos y el arbolado (tasa de captación y acumulación de carbono en biomasa arbórea aérea) han permitido mitigar y compensar una pequeña parte de la huella de carbono”, detalla la ejecutiva.
En relación a los próximos pasos, se están analizando propuestas de mitigación (reducción/compensación) con mayor eficacia, en base a las mediciones generadas y también se planea extender la medición de la huella de carbono a otras zonas del país, donde hay oficinas, además de ampliar el alcance de las mediciones realizadas en el Edificio Corporativo.
“Para nosotros es sumamente importante establecer una estrategia clara y métricas y objetivos que nos permitan comprender el impacto de nuestras acciones. Y es un gran desafío generar indicadores para tener un punto de partida a partir del cual mejorar, ajustar y potenciar los planes de acción que vamos llevando a cabo. Por ello año a año continuamos trabajando para mejorar la sistematización de los datos e indicadores”, concluye Azugna.