La fundación Ellen Macarthur presentó su segundo Informe Anual de Progreso en torno al Compromiso Global por una Nueva Economía del Plástico. Un documento crítico que da cuenta del 20% del mercado de packaging global.
La Fundación Ellen MacArthur y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente acaban de publicar el Segundo Informe anual de Progreso del Compromiso Global por una Nueva Economía del Plástico. El reporte analiza cómo las empresas y gobiernos signatarios, que juntos dan cuenta de más del 20% del mercado del packaging plástico mundial, están avanzando en relación a sus targets 2025 para reducir la polución plástica.
En este informe revelan que se han realizado progresos en dos ámbitos: la incorporación de contenido reciclado en la fabricación de envases plásticos y la eliminación de los elementos problemáticos que se reconocen con mayor frecuencia, como los envases de PS y PVC, los pigmentos negros de humo, las bolsas de plástico de un solo uso y las pajitas plásticas.
De todas maneras, el progreso hacia el reciclaje de empaques plásticos y la reducción de la necesidad de envases de un solo uso ha sido limitado: la adopción de envases reutilizables fue limitada y los esfuerzos de eliminación siguen centrados en un conjunto relativamente pequeño de materiales y formatos.
También se perciben diferencias significativas en la tasa de progreso de diferentes signatarios: mientras que algunos dieron grandes pasos, otros demostraron poco o ningún progreso con respecto a los objetivos cuantitativos.
Es alentador ver que los signatarios hacen progresos iniciales durante el primer año después de firmar el Compromiso Global. Sin embargo, los expertos aseguran que será necesario avanzar rápidamente para alcanzar los objetivos de 2025.
AVANCES MEDIBLES
-La presencia de contenido reciclado post consumo en los envases plásticos de los signatarios creció 22% en un año.
-Su capacidad de reciclado alcanzó el 1.1 de toneladas métricas.
-La cantidad de empresas rindiendo cuentas del volumen de packaging utilizado creció 24% en un año.
-Se registraron inversiones claves para lograr los targets 2025, elevando el monto total comprometido públicamente por los signatarios del Compromiso Global a más de US$ 10.000 millones.
“Este informe alienta el progreso hacia una economía circular para el plástico en algunas áreas, particularmente en el uso de plástico reciclado. Pero, a partir de ahora, será crucial acompañar también grandes pasos para repensar qué envase se comercializa en primer lugar. Estamos convocando a la industria para aumentar rápidamente los esfuerzos para reducir envases de uso único y eliminar los tipos de envases que no contribuyen a poner en práctica el reciclaje a gran escala”, aseguró Sander Defruyt, líder de la iniciativa Nueva Economía del Plástico en la Fundación Ellen MacArthur.
El desafío es enorme y el llamado es a todos los sectores, al reconocer que la acción voluntaria de la industria por sí sola no puede generar cambios a gran escala y al ritmo necesario.” Sabemos que la industria no puede promover el cambio por sí sola y estamos convocando a los formuladores de políticas públicas para que creen las condiciones propicias, además de incentivos y de una estructura internacional para acelerar esta transición”, agregó Defruyt.
UN LLAMADO A LA ACCIÓN
El llamado a la acción para erradicar la contaminación por plásticos se multiplica.
Llamado a las empresas a:
- Tomar medidas audaces sobre los tipos de envases que no son reciclables en la actualidad, ya sea desarrollando y ejecutando una hoja de ruta creíble para hacer que el reciclaje funcione, o innovando de manera decisiva para dejar de usar estos productos.
- Establecer objetivos de reducción altamente ambiciosos.
Llamado a los gobiernos a:
- Establecer políticas y mecanismos que brinden fondos dedicados y estables para la recolección y clasificación de materia reciclado, a través de contribuciones de la industria, como EPR, sin las cuales es poco probable que el reciclaje se amplíe.
- Establecer una dirección global y crear un marco de acción internacional, a través de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, basándose en la visión de una economía circular para el uso de los plásticos.
