Así lo reveló la Total Remuneration Survey 2019 de la consultora Mercer: el salario de los hombres se encuentra por encima del de las mujeres, mientras que en la mayoría de los niveles de carrera hay una caída porcentual o bien se mantiene el ratio de participación.
A pesar de los avances y las buenas intenciones, todavía queda un largo camino por recorrer para lograr la igualdad de género en la fuerza laboral. Según los datos de la Total Remuneration Survey (TRS 2019) de Mercer, en Argentina el nivel salarial de los hombres se encuentra por encima del de las mujeres: se trata en promedio de un 13%, ampliándose la diferencia especialmente en los niveles jerárquicos más altos, Directores y Gerentes Sr.
En paralelo, se observa que en todos los niveles de carrera prevalece el género masculino (63%) por sobre el femenino (37%). Al comparar las cifras de esta edición con la anterior encuesta TRS 2018, se observa un aumento en la participación de mujeres solamente en el nivel de Directores, con un incremento del 3%. Sin embargo, en el resto de los niveles se detectó una caída porcentual o bien se mantuvo el ratio. “Se trata de una decisión individual y de coraje que las mujeres dejen de ser la minoría con mayor representación a nivel global”, señaló Cecilia Giordano, CEO de Mercer en Argentina.
“Se trata de una decisión individual y de coraje que las mujeres dejen de ser la minoría con mayor representación a nivel global”, señaló Cecilia Giordano, CEO de Mercer en Argentina.
En la comparación a mediano plazo (2012 versus 2019), existe una mejora en cuanto a la prevalencia de mujeres. Y en la Generación Y, que es la que prevalece hoy en el mundo laboral, la participación femenina es sustancialmente mayor que en el género masculino. Dentro de los casos en los cuales la posición de CEO está ocupada por una mujer se encuentran principalmente en las industrias de Ciencias de la Vida, Consumo Masivo y Retail.
La brecha global
No es solo nuestro país el que presenta un panorama agridulce. Según el informe global 2020 de la consultora titulado When Women Thrive, la mayoría (81%) de las organizaciones de todo el mundo asegura que es importante mejorar la diversidad y la inclusión; pero menos de la mitad (42%) cuenta con una estrategia documentada, a largo plazo, para lograr la igualdad de género.
En esta edición, el reporte recoge las perspectivas de los principales líderes de Recursos Humanos y de negocios de 1.157 organizaciones ubicadas en 54 países y seis regiones, que representan a siete millones de empleados. La investigación abarca políticas y prácticas relacionadas con la diversidad, la inclusión y la igualdad de género, incluyendo temas relativos a responsabilidad, compromiso del liderazgo, igualdad salarial, desarrollo de carrera, salud y bienestar, así como bienestar financiero.
Además, solo el 40% de la fuerza laboral global es femenina, una cifra ligeramente superior al 38% que se registró hace cuatro años. De modo similar, si bien la representación de mujeres en puestos de alta dirección está mejorando (con un aumento de 3% en los dos niveles más altos), esta disminuye a medida que avanzan los niveles de carrera. La investigación revela que representan el 47% del personal operativo y el 42% de los puestos profesionales, pero solo el 29% y el 23% de los puestos directivos y ejecutivos, respectivamente.
"Las mujeres continúan enfrentándose a desafíos relacionados con una representación desigual en los puestos directivos, así como a limitadas oportunidades de desarrollo y progreso profesional en todas las industrias y geografías”, apuntó Martine Ferland, Presidenta y CEO de Mercer.
“La igualdad de género se ha convertido en un imperativo global y las organizaciones están adoptando medidas para marcar una diferencia. Sin embargo, dado que las mujeres continúan enfrentándose a desafíos relacionados con una representación desigual en los puestos directivos, así como a limitadas oportunidades de desarrollo y progreso profesional en todas las industrias y geografías, aún queda mucho por hacer para lograr el equilibrio de género”, apuntó Martine Ferland, Presidenta y CEO de Mercer.
Otros hallazgos claves a nivel mundial
“El éxito en términos de igualdad de género es más que una representación 50/50: se trata de lograr la igualdad de oportunidades, experiencias y remuneración. Para impulsar el cambio, las organizaciones deben tomar decisiones utilizando perspectivas basadas en datos, establecer objetivos medibles, hacer participar a todos los gerentes e instaurar una cultura que valore la diversidad”, alertó Angela Berg, Partner de Mercer. |
Más allá de la lentitud y desigualdad de los avances, desde Mercer señalan aspectos positivos que muestran progreso y un impulso hacia el futuro, con un impacto duradero. Según el estudio, las tasas de contratación, promoción y retención de mujeres ahora son comparables con las de los hombres, lo que supone una mejora respecto a hace cuatro años.
En paralelo, las instituciones están adoptando métodos más disciplinados para analizar la equidad salarial e implementando medidas para asumir dicha responsabilidad: el 72% cuenta con equipos especializados en iniciativas de diversidad e inclusión (frente al 45% anterior), y el 56% realiza análisis de equidad salarial para identificar las diferencias por género (frente al 35%).
“Las organizaciones que están adoptando medidas para mejorar sistemáticamente la representación de los grupos menos representados y crear una cultura más inclusiva lograrán resultados tangibles, a largo plazo, y los beneficios que ello conlleva”, reflexionó Angela Berg, Partner de Mercer.
También destacan a la participación de los líderes como otro aspecto positivo que promueve la paridad de género: un 66% informó que los altos ejecutivos participan activamente en las iniciativas y programas de diversidad e inclusión (en comparación con el 57% registrado en 2016), y más de la mitad (57%) informan lo mismo para los directores (frente al 52% en 2016).
“Lento, pero seguro, las organizaciones permiten que las mujeres intervengan y progresen. Y las organizaciones que están adoptando medidas para mejorar sistemáticamente la representación de los grupos menos representados y crear una cultura más inclusiva lograrán resultados tangibles, a largo plazo, y los beneficios que ello conlleva”, reflexionó Angela Berg, Partner de Mercer.