La compañía, que opera más de 2.000 Mc Donald's en la región, presentó su nueva área corporativa y un informe en el que da cuenta de sus impactos ambientales y sociales. El trabajo juvenil y la diversidad en primer plano.
Arcos Dorados, la franquicia de McDonald’s que opera la marca en Latinoamérica, dio a conocer su nueva área de Social Engagement y presentó un documento en el que resume sus principales impactos sociales y ambientales en la región.
Liderada por Lyana Latorre, el área tiene base en Colombia y nació hace casi un año, con referentes en los principales mercados de la compañía, Argentina, Brasil y México. “Queríamos salir a comunicar con algo concreto para contar. Hicimos un gran trabajo para identificar los temas sociales y ambientales en los que impactamos”, resumió Latorre, Directora Senior de Corporate Social Engagement de Arcos Dorados para América Latina, durante la presentación del informe en Argentina.
Bajo el nombre "Preparando la receta del futuro”, la compañía sintetiza los impactos y acciones realizadas el año pasado en los 20 países de América Latina y el Caribe, donde operan y se ubican nada menos que 2100 restaurantes de la cadena. Y los organiza en torno a cinco grandes compromisos en torno a los grupos de interés clave: Empleados, Comunidad, Planeta y Alimentación y Clientes.
El empleo juvenil en primer plano
En el eje de Empleados la empresa hace especial énfasis en el tema de empleo juvenil. La cadena da trabajo a más de 75.000 jóvenes latinoamericanos. “Arcos Dorados es una de las compañías líderes en primer empleao en la región”, contó Latorre en la presentación. En la actualidad, trabajan en conjunto con los ministerios de trabajo y diferentes organizaciones privadas, y a través de iniciativas como NEO del BID, que buscan que más jóvenes tengan su primera oportunidad de trabajo formal.
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Una apuesta a la base de la pirámide Al ritmo de la urbanización de la Villa 31, Arcos Dorados ya planea poner un pie en este barrio donde viven ni más ni menos que 40.000 habitantes. Y será en este local donde continuará apostando al empleo juvenil. "La idea es tomar cerca de 80 empleados de esa comunidad. Cuando se conoció la noticia, nos escribieron un montón de fundaciones del barrio", cuenta Latorre, quien anticipa que la apertura podría concretarse para fin de año, comienzos del 2018. Pero este local no se trata de un caso aislado de apuesta a lo que se llama el mercado de la base de la pirámide. Arcos Dorados también planea pisar fuerte en Soacha, uno de los municipios más poblados de Colombia, pero de más bajos recursos. |
La diversidad e inclusión también es un tema de agenda en este eje. La compañía tiene una larga trayectoria en Argentina en la inclusión de personas con capacidades especiales en su plantel. El programa existe hace más de 20 años y fue desarrollado junto a Fundación DISCAR. En la actualidad emplea localmente a 97 personas discapacitadas, cifra que asciende a 1.300 en toda la región. “Argentina es el primer país en el que empezamos a jubilar trabajadores con discapacidad. Ya tenemos tres casos y es una tranquilidad extra para los padres”, detalló Latorre.
La igualdad de género es otro tema de trabajo. En los 20 mercados en que opera Arcos Dorado, 57% de los empleados son mujeres. Pero lo que es más interesante es que quién gerencia los locales: en el 53% de los casos se trata de gerentas.
Medio ambiente y abastecimiento sostenible
En materia de compromiso con el planeta, la compañía lleva adelante iniciativas bien diversas. Una de ellas es el Proyecto Natal, en el que 447 restaurantes reusan el agua de los aires acondicionados para reutilizarla en los sanitarios o para el lavado de los estacionamientos. Se lleva adelante principalmente en Brasil, pero también en Colombia y Puerto Rico y podría desembarcar en Argentina. También poseeen cuatro locales certficados LEED, uno de ellos el de Pilar, en Argentina.
También trabaja en generar una cadena de abastecimiento sostenible y en muchos mercados trabaja con productos como café certificado (100% en Brasil) y 100% del pescado y aceite de palma con distintos sellos sustentables. También apoya un proyecto global para frenar la deforestación en el Amazonas, llamado Moratoria Soja, por el que la cadena y otros grandes player se comprometieron hace diez años a no comprar soja proveniente de la deforestación del Amazonas, luego de una gran campaña de Greenpeace. Además, el 90% de los proveedores de la región son locales.
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ODS en la mira Los impactos sociales y ambientales de la compañía también se evaluaron a la luz de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. La compañía se focaliza en cuatro, tal como destaca en el informe:
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El compromiso con la alimentación es otro de los ejes críticos. La disponibilidad de información nutricional sobre los productos, la política de Puertas Abiertas que incluye visitas a las cocinas de los restautrantes y acciones como la quita de las grasas trans de las papas fritas son algunas de las acciones concretas.
La cadena también debió hacer frente en Chile a la Ley de Etiquetado, que regula los alimentos altos en grasas, sal o azúcar y especialmente aquellos promocionados con juguetes como gancho. Y debió adaptarse a las nuevas reglas de juego para no dejar afuera un producto core de la cadena, como es la Cajita Feliz. “Fuimos la única compañía que no tuvo que dejar de vender los juguetes en Chile”, reconoció Silvina Seiguer, Directora de Comunicaciones Corporativas South Latin America de Arcos Dorados, en la reunión.
Desde Mc Donalds a nivel corporativo les habilitaron algunos cambios, como por ejemplo sumar palta a la hamburguesa, para que la cajita lograra tener 600 calorías. “Temos restricciones pero vamos haciendo cambios que nos permite la corporación para adecuarnos”, agregó.
