2020: fecha límite para ganarle al cambio climático


Desde la nueva iniciativa Mission 2020, señalan ese año como el momento crítico para transformar el planeta.¿La clave? El desarrollo sostenible en seis áreas críticas. ¿Qué pasa si nos pasamos de la fecha? Nos despedimos del Acuerdo de París y de los 17 ODS de la ONU.

"Es necesario. Es deseable. Es alcanzable". Éste es el lema de la nueva campaña Mission 2020. Covocada este mes por Christiana Figueres, ex Secretaria Ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCC, por sus siglas en inglés), la iniciativa reúne a un grupo de expertos que identificaron el marco temporal de cómo asegurar un clima estable y seguro, cumplir con lo prometido en París, alcanzar los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) al 2030 y lograr las emisiones cero al 2050. Para todo eso no nos queda mucho tiempo: el 2020 es el punto de inflexión.

El 10 de abril fue el lanzamiento oficial de la iniciativa y durante la jornada que se llevó adelante en Londres, Figueres identificó junto a un grupo de líderes y expertos climáticos las razones por las que tenemos tres años para cambiar el rumbo.

"Todos tenemos el derecho de prosperar y si las emisiones no empiezan a declinar rápidamente al 2020, las personas más vulnerables del planeta van a sufrir todavía más como consecuencia de los devastadores impactos del cambio climático. La ciencia nos dice que es nuestro imperativo, la tecnología nos muestra que tenemos lo que se necesita para remediarlo, la economía nos apunta en la dirección correcta y los beneficios para la humanidad serán inmensos", disparó Figueres.

Empezar ya
El llamado surgió en parte como respuesta a la Orden Ejecutiva que Donald Trump emitió el 28 de marzo para retroceder en muchas de las regulaciones ambientales que se generaron durante la administración de Obama. Esto incluye el Plan de Energía Limpia que apuntaba a reducir las emisiones de plantas a base de carbón.

Pero todo nace con el histórico y vinculante Acuerdo de París que le dio al mundo un mapa para abordar la problemática de una vez por todas. En diciembre de 2015, 194 países adoptaron universalmente el texto, comprometiéndose a mantener la elevación de la temperatura global entre los 1,5°C y los 2°C sobre niveles pre-industriales.

Sin embargo, lo que quedó menos claro fue la urgencia con la que había que actuar para honrar el cometido. Para ser exitosos, las emisiones de gases de efecto invernadero deben empezar a declinar de manera constante a partir del 2020. Doblar la curva en cualquier momento posterior a ese año, elimina las posibilidades de estar dentro del rango y además aleja a los Objetivos de Desarrollo Sostenible fuera de nuestro alcance.

"No hay tiempo para la duda. Lo que ha estado faltando desde París es un punto focal a corto plazo para la acción, que es la razón por la que hemos reunido algunas de las mejores mentes en torno al tema para demostrar colectivamente que el arco de transformación a un sistema de energía libre de fósiles es posible. Tenemos una responsabilidad conjunta de elevar la ambición, escalar nuestras acciones e ir hacia adelante más rápido juntos para salvaguardar los objetivos de desarrollo sostenible y proteger el derecho inalienable a la vida de nuestra generación y las venideras. No lleguemos tarde", exhortó la ex Secretaria Ejecutiva de UNFCC.

Las metas

Desde el documento y desde la iniciativa explican que durante los próximos tres años, empresas, inversores y legisladores tienen que dar pasos osados, pero alcanzables, para alcanzar una serie de hitos.

Estos se dividen en seis áreas cruciales que piden que:

  • En Energía: las renovables desplacen a los combustibles fósiles como fuentes eléctricas a nivel mundial
  • En Transporte: las formas de movilidad de emisión cero sean las preferidas en las grandes urbes y rutas del mundo
  • En Infraestructura: las ciudades y estados establezcan planes e implementen políticas y regulaciones con el objetivo de lograr una infraestructura totalmente descarbonizada al 2050
  • En Uso de la tierra: la deforestación a gran escala sea reemplazada por restauración de la tierra a gran escala y la agricultura se vuelque a prácticas amigables
  • En Industria: la industria pesada (incluyendo la de hierro y acero, cemento, química y petróleo y gas) se comprometa a cumplir con París
  • En Finanzas: la inversión en la acción climática supere los USD 1 billones anuales y todas las instituciones financieras tengan una estrategia de transición divulgada

Para la presentación y para todo el accionar de la movida, se valieron del reciente informe del grupo "2020: The Climate Turning Point". En base al documento, subrayan la importancia que tiene la fecha límite, pero todavía más importante, cómo se puede lograr de manera realista, gracias a la acción climática que ya tiene lugar y que crece exponencialmente en seis sectores cruciales: Energía, Transporte, Infraestructura, Uso de la tierra, Industria y Finanzas.

El texto es una colaboración entre la Universidad Yale, Carbon Tracker, Climate Action Tracker (un consorcio de Ecofys, New Climate Institute y Climate Analytics) y Potsdam Institute for Climate Impact Research. Además, cuenta con los análisis de Conservation International, The New Climate Economy, Partnership on Sustainable Low Carbon Transport, Systemiq y We Mean Business .

Es necesario
El alto costo del cambio climático en gran parte lo sufren las comunidades más vulnerables alrededor del globo. Sufren de pérdidas humanas constantes y continuamente se encuentran en la necesidad de reparar los daños de los severos impactos ambientales y el aumento en los niveles del mar.

"Existe un verdadero nerviosismo científico de que si excedemos los 2°C, nos arriesgamos a cruzar puntos de quiebre que dispararían de manera irreversible el calentamiento e impactos humanos imparables. La misión más importante de la humanidad es desviarse de este camino potencialmente catastrófico y transformar el mundo en un planeta próspero, limpio, saludable y sustentable", apuntó Johan Rockström, Director de Stockholm Resilience Centre.

Los repetitivos gastos en infraestructura desvían las inversiones en áreas como educación, salud y seguridad alimenticia, con lo que se apuntala más la pobreza y se acelera la migración involuntaria.

A esto se suma que la industria de seguros ha advertido que si el mundo excede los 2°C, se volverá de manera sistemática no asegurable debido a la frecuencia e intensidad de los impactos climáticos extremos. Alcanzar el punto de inflexión del 2020 va a volver expeditiva la transición menos costosa hacia una economía libre de fósiles al 2050, protegiendo a los más vulnerables y adentrándonos a una economía más segura.

Es deseable
Sin embargo, lo que parece como una carga, esconde en realidad tremendas oportunidades. En las seis áreas de acción se demuestra que esta meta no es solo necesaria, sino también deseable y alcanzable.

El valor intrínseco de los beneficios van más allá de la cuestión económica, pero, para el 2050 los esfuerzos para ralentizar el cambio climático nos harían USD 19 billones más ricos también.

Alcanzar la meta al 2020 traerá beneficios adicionales en salud, energía, seguridad alimenticia y creación de empleos. De esta forma, se generará una base fortalece para la prosperidad compartida y la estabilidad financiera.

Es alcanzable
Pero lo que resulta más alentador es que ya se están dando grandes cambios en torno a los seis rubros críticos que demuestran que es posible el cambio dentro de tres años.

"Tenemos que doblar la curva global de las emisiones no más tarde que al 2020 y alcanzar una economía global libre de fósiles al 2050. Sí, se trata de una gran transformación ¿Es posible? Sí ¿Es un sacrificio? No. La evidencia crece día a día de que un mundo descarbonizado es un mundo más atractivo", alentó Rockström.

Las renovables son cada vez más baratas y sobrepasan a las de carbono en varias jurisdicciones, el progreso tecnológico en almacenamiento de baterías mejora la capacidad de las fuentes alternativas a la vez que acelera el crecimiento del mercado de autos eléctricos.

Gracias a la demanda de los clientes, los líderes de negocio cada vez erradican más materias primas que causan deforestación de sus cadenas de suministro. Las ciudades crean alianzas público-privadas y financian infraestructuras eficientes. En el apartado financiero, la comunidad mejora su divulgación, mientras que las corporaciones empiezan a probar sus estrategias para respetar el límite bien por debajo de los 2°C.

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