Allí se resumen los nueve años de trabajo de este programa emblemático que vincula a los jóvenes y la tecnología. La iniciativa tomará entidad propia y se convertirá en fundación en breve.
Fundación IRSA presentó el libro "Puerta 18", que comparte la experiencia de los nueve años de recorrido de esta programa, a través de testimonios de los líderes, jóvenes y voluntarios que lo integran.
Se trata de uno de los proyectos más significativos de Fundación IRSA: un programa de educación no formal, con la tecnología como herramienta principal, que tiene como objetivos estimular habilidades e intereses, aportar al descubrimiento de las vocaciones, disminuir la brecha digital y mejorar la futura empleabilidad. En estos nueve años de historia, pasaron por el programa 3.300 jóvenes, muchos de ellos hoy tienen su propio emprendimiento. Además, se otorgaron 25 becas en estudios superiores, 17 jóvenes viajaron al exterior para formarse y compartir conocimientos y uno de los mejores frutos fue que 150 jóvenes se insertaron laboralmente en empleos calificados.
“Creo que uno de los grandes aciertos de Puerta 18 fue la metodología de revisar todos los programas que hacemos, mirar a los chicos y cambiar con ellos” afirmó Federico Waisbaum, Director de Puerta 18, en la presentación en el Museo de los Niños del Abasto.
Paula Solsona, Directora Ejecutiva de Fundación IRSA, cerró por su pare el encuentro, anunciando una importante noticia: “Quiero compartirles uno de los mejores logros vinculados con la maduración de los proyectos. Fundación IRSA tiene en su impronta dejar volar los proyectos semilla que, luego de unos años, están preparados para autosustentarse. A partir de hoy, Puerta 18 se constituye en una Fundación ya que acaban de aprobar su personería jurídica. Esto significa abrir nuevos horizontes, desplegar alas y asumir desafíos con mayor autonomía”.